entre pedales, homos, ciervas,mamuts, bisontes...

Realmente eso es lo que decora mi orbea Oiz, con basculante de aluminio. Los dibujé copiandolos de pinturas rupestres auténticas, pero para que destacar sobre el cuadro nuevo que acababa de comprar, despues de decapitar a mi extinta y añorada Massi ZX-II, por la tija del sillín..., la verdad es que esa doble suspensión soportó dos viajes con trasnportín anclado al tubo del sillín, es decir, al aire, sin apoyo sobre los tirantes. El primero a Tragacete desde la Sierra Calderona, aquí en Valencia y el segundo, ya algo más ambicioso y en solitario, sin GPS y acojonado..., viajé hasta los yacimientos de Atapuerca en Burgos. Hace un millón de años, Homo antecessor ocupaba ya esas tierras...,

La prehistoria me fascina..., por eso me tiré mas de tres horas decorando con papel adhesivo simulando el roble y el mukali y con pintura color gamuza ese cuadro que acababa de comprar. Sobre su nuevo aspecto pude dibujar a las ciervas de Altamira, a sus bisontes, las vulvas de mujer talladas sobre la roca de multitud de cuevas fancesas, la famosa secuencia del chaman herido por el bisonte agonizante de Lascaux y el perfil de un impresionante mamut lanudo también reproducido en las cavernas galas..., y salí a pedalear con la Bicipalo, como la bautizaron los colegas de la Peña cilcista de montaña La Pajara, de Xirivella en Valencia, aunque a mi me gusta llamarla la Primigenia, por aquello del origen de la Prehistoria humana...., y salí a pedalear, pero esa es otra historia, otras vivencias que trataré de relatar poco a poco, tratando de ser ameno, de ser respetuoso y con ánimo de entretener, de distraer y de transmitir mis gozos y alegrias, mis sonrisas y mis momentos de paz..., cuando pedaleo sobre ella, divagando ensimismado, entre pedales, entre homos, ciervas, mamuts, entre bisontes y entre galgos imaginarios, entre huskys que solo yo veo tirando de la Primigenia cuando mis piernas no pueden más.