Ala Quebrada...., un vencejo que casi se arrancó el ala contra el cable anclado muy cerca de la junta de dilatación donde dcidió anidar, desde entonces,día tras día lo esquiva para poder alimentar a su polluelo.

sábado, 27 de abril de 2013

PETRUS, PIEDRA, PEDRO, BICIPALO, HOMO.




















   Menos da una piedra…., reza el dicho, sin embargo a mi se me van los ojos cuando durante los paseos con la manada me encuentro con los ribazos o con los canchales, con
 los majanos como les llaman en la meseta.
  Las piedras no hablan ni se mueven pero atesoran el tiempo y el origen de nosotros mismos, son la esencia del planeta junto al agua y ellas son pergaminos sobre los que la misma Tierra escribe sus recuerdos y sus memorias.
   Las observo cubiertas de líquenes, de mohos, dando vida desde su propia dureza, contemplando a los dos caracoles o dejando que la uva de pastor crezca entre ellas. La manada husmea entre los resquicios y merodean entre los arbustos, empapan sus pelajes con la lluvia y me observan extrañados.
   A veces ni el musgo ni los líquenes las colonizan y las piedras se muestras desnudas, resquebrajadas y arrancadas de sus lechos. Distingo decenas de pequeñas piedras apelmazadas por el barro antiquísimo que tras miles de de años se petrificó atrapando a los cantos rodados de las avenidas o a los limos  de los humedales que antaño empapaban estas tierras, entre el Camp del Turia y la Sierra Calderona.
   Imagino los lagunazos de aguas remansadas, a las hojas y a las acículas cayendo sobre las aguas o sobre las orillas saturadas de agua dulce, imagino un entorno verde y vivo, natural, ancestral. Imagino como el tiempo se acelera, como el sol se pone y sale miles de veces, como la Tierra gira y gira y descubro al bando de golondrinas volando por encima de mis sentimientos y con un cielo plomizo y gris por encima de ellas.
   Soy la única persona que las ve y las oye, sonrío pensando que es una señal, pensando que me saludan…, son momentos mágicos, momentos íntimos entre mis ojos y la manada.
 
























4 comentarios:

Dorita/Alh. dijo...

Pedro, que Poeta eres!
Besico.

Pedro Bonache dijo...

Gracias Dorita,es que los fines de semana mi mundo se reduce a eso, a piedras, perros, pinos, tierra y aves, bueno y a insectos, je, je, je.

Marga Preda dijo...

Las vidas pasan y las piedras... se quedan.

Pedro Bonache dijo...

Si Marga, ellas se quedan...,porque siempre estuvieron aquí, desde el inicio de los tiempos.