Ala Quebrada...., un vencejo que casi se arrancó el ala contra el cable anclado muy cerca de la junta de dilatación donde dcidió anidar, desde entonces,día tras día lo esquiva para poder alimentar a su polluelo.

sábado, 23 de noviembre de 2013

DE NUEVO EL VIENTO.





  Hoy ya no nevaba en la Sierra Calderona, pero el viento seco y frio del norte soplaba y arreciaba como durante muchos de los días del invierno pasado. Llegaba cortante y afilado, zumbando por encima del pinar y limpiando la atmósfera de brumas y nubes bajas.


   El viento llegaba remontando los cañones, colandose entre los estrechos, azotando al recio monte bajo y despues, rodando y girando entre torbellinos de polvo, descendía hasta la misma costa, removía los granos de arena de la playa y empujaba las olas mar adentro, aplanaba las aguas y permitiendo que el sol cegador se reflejase en ellas robandoles el azul mediterraneo y creando un espejo brutal, o una especie de costra de hielo blanquecino como surgido de una subita glaciación...., lo contemplaba todo desde la pista del Campillo a Coronel con una nitidez sorprendente, podía ver la curva del Golfo de Valencia y el destello de La Albufera, incluso pude imaginar sus carrizos azotados por el viento y el oleaje lacustre balancendo  a los albuferencs y batiendo contra las compuertas del Puchol o del Perellonet....,
  

sábado, 16 de noviembre de 2013

EL VIEJO DE HIELO Y VIENTO.




  El viejo conocido ha llegado esta mañana casi sin avisar, aunque se que la Calderona lo esperaba y en el fondo yo también, ya casi habia olvidado lo que era el frio y los cielos planos y de hielo, grises y apagados.
  Los primeros copos de nieve me han caido remontando por el camino del Campillo hacia el Collado de la Morería, en algunas curvas el viento arreciaba y yo me subia el pasamontañas mientras murmuraba.
  - Vaya, como en los viejos tiempos...
  Arriba, en la Moreria, el viejo conocido nos esperaba a mi y a la Bicipalo, reía y se convertia en una cortina de cellisca grisacea que bajaba por la Vigueta desde Tristan, desde el norte frio de la peninsula. El viejo conocido venía con sus mascotas, lobos cubiertos de hielo y escarcha que trepaban por las laderas, que removia los arbustos y que se convertían en flechas blancas que mordisqueaban mi piel.
   El viejo conocido aullaba, allí arriba, justo donde terminaba la franja grisacea, al otro lado aún lucia un sol engañoso, pero en las alturas, ese viejo conocido saludaba a cada laja de rodeno, a cada pino, a cada coscoja, a cada alcornoque y a ese ciclista que descendia buscando la calma de las tierras bajas, aún sabiendo que los lobos de hielo corrían tras él desde las montañas, desde esos rincones ocultos de la Sierra Calderona donde uno se siente tan solo un mamifero más.

domingo, 3 de noviembre de 2013

A VECES, LA SERRANIA TE DESPOJA DE LO HUMANO.




  
 Sonrío ante la cuesta, mientras los ladridos de los mastines se quedan antrás, tampoco insisten mucho y los enormes chuchos vuelven a sestear mientras encaro las lajas de piedra gris que acuchillan la pista.
   Me gusta esta cuesta, es corta, pero está rota, aunque deja una trocha por la que debes pedalear si quieres coronarla sin echar pie al suelo.
  Le tengo querencia a esta rampa de piedra porque despues de unos cuantos virajes me lleva a un rincón escondido de la Calderona, a un paraje de esos en los que no ves nada que te recuerde al asfalto y a la urbe, uno de esos parajes en los que los barrancos estan repletos de una vegetación tan espesa que tan solo los jabalies y los zorros se aventuran en ella, aunque me imagino que alguien como Pasos Largos no hubiese dudado en adentrarse en ella huyendo de la Guardia Civil.
  Le tengo querencia a este camino como a veces los hombres le tienen una querencia malsana y enfermiza a la serrania, a la Serrania de Ronda o a Sierra Morena...., aunque allí, en Sierra Morena, Marcos se limitó a vivir rodeado de lobos sin secuestrar a nadie y sin acechar en los caminos, como si hizo Pasos Largos hasta su ultimo día, cuando un balazo en el pecho y otro en el vientre acabaron con su vida como una posta acaba reventando a un jabalí.
   Me imagino que de la misma manera que el camino busca el hondo del barranco y desaparece con el contraluz.....



..... el hombre pierde a veces su condicion de humano y se entrega a la serrania. A Pasos Largos le llamaron el ultimo bandolero andaluz y es posible que un aura de heroismo o admirable rebeldía le rodee para siempre, pero todo parece decir que la misma serrania le arrebató lo poco que le quedaba de humano, de empatia y de compasión. No podemos olvidar su horrible crimen, a hoz y escopeta, sus asaltos y finalmente su vuelta al monte, pese a que le ofrecen trabajo de guarda en una finca, propiedad de un hacendado que fue secuestrado por el mismo Juan Mingolla, dicen, que el ultimo bandolero andaluz.